jueves, 14 de octubre de 2010

Primavera (Espárragos y Frutillas)

Me encanta la primavera, es la mejor época del año. 
También me di cuenta que la primavera es la explicación de muchos males. Por ejemplo, comienzas a  estornudar y a tener alergias que nunca antes habías tenido, ronchas en la cara por las miles de semillas que salen volando de los árboles (es eso o que la crema de cara que has usado todo el año de repente no te está haciendo bien), de paso te resfrías porque decidiste que lo mejor era guardar la ropa de invierno, ya que si salió el sol es porque debe haber calor...mmm. Entonces en las mañanas mientras caminas a tu trabajo te das cuenta que debiste haber esperado unas semanas más antes de guardar las camisetas y chalecos gruesos. También pasa que el comercio fomenta que te resfríes, ya que si decidiste que quizás lo mejor sería comprar un chaleco, ese que no te compraste en invierno porque era demasiado delgado (y que ahora sí necesitas porque tontamente guardaste los que tenías), entras a las tiendas y lo único que están vendiendo son trajes de baños, poleras y chalas (esas que en verano, cuando realmente las quieras comprar, se convertirán en chalecos, bufandas y ropa de colegio que en febrero no necesitas!). 
Pero también la primavera tiene su lado bueno, después de la mañana helada (en la que seguramente ya te resfriaste y estás pensando que es alergia), sale el sol y eso te anima. Hasta el trabajo se hace más ameno, y eso que siguen siendo las mismas personas que no quieres ver los lunes ni el resto de la semana. 
Puedes comer más frutas, y esas ensaladas que en invierno te da frío mirar y saben a pasto mojado, ahora están sabrosas e incluso apetitosas. 
Hoy día, por ejemplo compré frutillas en la calle. Me dio un poco de cosa comprarlas porque no sabes si lo que están vendiendo se ve lindo por fuera y por dentro están todas podridas, pero bueno.... ir a la feria o a un supermercado no era opción. Sin embargo estaban buenísimas! 
A parte de eso, estaban los espárragos. Otra delicia de la época. 


Así que para seguir aburriéndolos, y después de investigar un poco les puedo decir que esos dos cosas además de apetitosas son interesantes, por ejemplo:


El Esparrago 
Primero es bajo en calorías (importante si eres mujer), tiene vitamina A que sirve para el pelo y las uñas, y vitamina C. Además tiene Potasio, Calcio, es antioxidante, excelente diurético (aunque eso a muchos les desagrada, sobre todo por el olor), es bueno para el sistema nervioso.


El espárrago se usa desde tiempos lejanos como una verdura y para la medicina, debido a su sabor delicado y sus propiedades diuréticas. Fueron cultivados por los antiguos egipcios, los griegos y los romanos, los cuales los comieron frescos de temporada y secaban el fruto para su uso en invierno. Durante la época del Renacimiento, el espárrago fue promocionado como un afrodisíaco y prohibido en las mesas de la mayoría de conventos. Sólo pasado un tiempo volvió el espárrago a ser verdura y se convirtió en un producto de lujo con el que la naciente burguesía, que luchaba por equipararse a la nobleza, demostraba su estatus social.


Las Frutillas
En general, tienen pocas calorías también, muchas vitaminas al igual que el esparrago pero lo interesante es que se antiguamente se creía que rejuvenecía, aunque ahora muchas marcas cosméticas también lo cree.
Las frutillas grandes que conocemos ahora son de época reciente, en Chile el 1614 el misionero español Alfonso de Ovalle descubrió en Chile frutos grandes de frutillas silvestres que después se llamaron "Fragaria Chilensis"
Lo que tiene en común con el esparrago, es que también en tiempo antiguos se consideraba un alimento de la clase alta. 


Es interesante que ambos productos en Chile estén al alcance de casi todos los bolsillos, por eso es que hay que aprovecharlos!